Qué va a
pasar este año en el mundo y en nuestro país? Cómo va a desarrollarse esta
negociación? Cuáles son los escenarios que se plantean en ese conflicto? Cuáles
son los temas de la agenda internacional? Oiga, usted que sabe de eso de la diplomacia,
para qué sirve la ONU y la integración? Por qué tenemos que preocuparnos por
los demás, atendamos lo que nos interesa acá en nuestro país! De eso se
encargan los políticos y los diplomáticos! Eso solo pasa acá en nuestro país! Por
qué tenemos que dialogar? Esta es solo una selección de la retahíla de
preguntas y afirmaciones con las que nos confrontan a quienes estudiamos,
investigamos, hacemos docencia o ejercemos profesionalmente en algunas de las
distintas áreas de las relaciones internacionales.
No hay una
respuesta mágica y seguramente no hay una respuesta que sea completamente
satisfactoria. Hay una serie de recursos analíticos que anteceden las
respuestas sería: depende de…, si se toma en cuenta…, de acuerdo con …, en este
contexto ….., es un problema que requiere …. y tantos otros. A eso se suman otros
elementos que algunos llaman el ejercicio terminológico pero ineludible en la
perspectiva y argumentación que se quiera en las respuestas, ponencias,
entrevistas, investigaciones, en una clase, en una charla o en una sencilla
conversación familiar.
Lejos de
pretender ser panacea y oráculo analítico y prospectivo del año 2017, cuando
estamos próximos a iniciar el segundo trimestre del año, queremos dejar una
trilogía de reportes sobre perspectivas del 2017 que activarán sus comentarios
en torno a las relaciones internacionales y globales. Cada uno de estos
informes tiene distintos contextos académicos, institucionales,
geográfico-espaciales y enfoques espistemológicos que seguramente influyen en
las preferencias de contenidos que desarrollan. La primera intención fue hacer
una selección multilingüistica pero nos quedamos con los de lengua hispana por
considera que los mismos igualmente nos presentan diversidad para la activación
de debate.
Por separado
o en conjunto según sean las preferencias de quien nos lee, esta trilogía
permitirá activar lo que en el espacio ARIGlobal señalamos como propósito: la reflexión sobre distintos temas de la
agenda internacional y de las relaciones exteriores de Venezuela que combina lo
interméstico y global.
Al final de
esta breve presentación insertaremos texto parcial e imagen de cada reporte, el
cual podrán revisar de manera amplia a través del enlace respectivo. Espero que
no se distraigan mucho es esos portales y puedan regresar a este Blog para
darnos sus impresiones. Bienvenidos los comentarios!
@mirnayonis
Profa. Mirna Yonis
Responsable
de la Maestría
en Relaciones Internacionales
Extracto de los Informes -
Con un Click en los títulos pueden llegar a los textos originales.
Con un Click en los títulos pueden llegar a los textos originales.
Empiezo mal el artículo,
cuestionando el nombre de esta admirable web que me deja un espacio para
expresarme. Pero bien se podría llamar El Desorden Mundial del siglo XXI,
porque, más que un siglo de orden y reglas de juego claras, parece que vamos
hacia un desorden sin reglas o con reglas nuevas aún por definir. En este
artículo voy a dar algunas claves para entender los cinco paradigmas que están
cambiando en el mundo y cómo están enterrando los esquemas que teníamos desde
la posguerra fría. Bienvenidos a una nueva era.
- La era de los pos Derechos Humanos
- La era de la pos política tradicional
- La era de la posverdad
- La era del pos liberalismo democrático y económico
- La era posinstitucional
 |
| La tentación de San Antonio. Salvador Dali (1946) |
Finalmente, el mundo que
viene verá temblar o reducir la trascendencia de las instituciones que
trabajaban por una cierta gobernabilidad global. Hay un claro impulso en muchos
países por un replegamiento interior, un “no querer mirar fuera”, un resurgir
nacionalista, etnocéntrico y patriótico que es incompatible con ceder soberanía
y con la esencia de la Unión Europea, la OTAN, la Corte Penal Internacional, la
Organización Mundial del Comercio y la mismísima ONU. No sabemos todavía cómo
se verán afectados, pero la inercia del momento claramente juega en contra de
estos organismos.
Estamos dentro de un
periodo de transición hacia una nueva era, y las transiciones, por sí mismas,
suelen ser imprevisibles y de final incierto. Las señales que nos da el momento
actual son más de un nuevo desorden sin normas claras que de un nuevo orden.
También es verdad que el sistema mundial es como un transatlántico: su rumbo no
se puede cambiar de la noche a la mañana ni se pueden dar giros bruscos. Pero
el mar de fondo es de un cambio de reglas. Si vamos en dirección a la tormenta
perfecta o solo hacia unos chubascos es lo que nos queda por descubrir. Pero
tranquilos, que mientras nos lo vaya contando El Orden Mundial en el Siglo XXI
estaremos bien informados.
 |
| Tomado de Alinet.oOg |
Parece consecuencia de una
arraigada tradición eso de al finalizar el año, o en las primeras semanas del
siguiente, hacer análisis de situación. Ya sea a nivel local, nacional o
internacional, ya sea sobre el arte, la economía o el acontecer gastronómico, la
costumbre está ahí y los escritos proliferan. Pues bien desde la oportunidad, y
cierta legitimidad, que da el ser parte de una organización de solidaridad y cooperación internacional, intentamos sumar en esta línea de
reflexión sobre hacia dónde va este mundo cuando recién hemos cambiado el
calendario.
A partir de aquí, el futuro inmediato se
abre hacia opciones diametralmente opuestas. O avanzamos hacia la construcción
de sociedades más justas, donde el desigual reparto de la riqueza y su
consecuencia más directa, el brutal resquebrajamiento de las sociedades por la
desigualdad, sea una pesadilla olvidada; o, por el contrario, se optan por
salidas neofascistas que profundicen en ese camino, como el ascenso
generalizado de la ultraderecha y de la derecha extrema parece asegurarnos.
Pero, teniendo todo esto en cuenta, centrémonos ahora en esa anunciada revisión
de situación que citábamos al principio como objetivo de este escrito.
…
Hoy, solo unas décadas después
discutimos sobre su oscuro inmediato futuro. Pero, sostenemos también que hoy
el riesgo está precisamente en la desideologización que algunos pretenden para
que el neofascismo, con múltiples caras, pueda de nuevo enseñorearse del mundo
en este año que recién iniciamos. Por todo ello, les deseamos un buen año, que
sepamos cargarlo de ideología.
PerspectivasGlobales 2017, del Consejo Venezolano de Relaciones Internacionales, COVRI(Febrero 2017)
…
Asumir
estas dificultades resulta pertinente como punto de partida, bien porque
tendemos a construir nuestras ideas del futuro basados en la prolongación de lo
conocido y no en la imaginación libre y bien informada, lo que nos lleva a
centrarnos en las continuidades y pasar por alto los cambios; bien porque
estamos tratando asuntos humanos donde está presente el libre albedrío, y por
tanto las predicciones más alarmantes provocan respuestas que impiden su propia
materialización. En relación a esto último, podemos decir que las mejores
predicciones son aquellas que nunca se cumplen. Fueron hechas deliberadamente
para evitar peligros.
…
Si
casi nadie previó los principales acontecimientos y tendencias de los últimos
25 años -el hundimiento del Muro de Berlín, el fin de la URSS, la ruptura de la
antigua Yugoslavia, el 11-S, las fallidas revoluciones árabes o la crisis
financiera de 2008-, se necesita mucha fe para confiar totalmente en las
predicciones que hemos realizado con la mayor rigurosidad posible para 2017,
donde hay muchos actores relevantes, menos y/o peor liderazgo político, y una
agenda global más compleja que en el pasado.
1. Los Estados Desunidos de Trump y la
Erosión del Orden Internacional Liberal
2. La Unión Europea en Trance Existencia
3. Un Año de Oportunidades para Putin
4. Arenas Cambiantes en Medio Oriente y
Norte de África
5. Un Año Agridulce en África
Sub-Sahariana
6. Asia en Transformación
7. Panorama poco Halagüeño para América
Latina
8. El Caribe
9. Petróleo y Cambio Climático.
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Invitación abierta a reflexiones. Los comentarios son bienvenidos.
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